Del análisis de datos anuales extraídos por el Observatorio de las Violencias de Género 2020 y 2021 se desprende que el promedio de femicidios ha sido:
En 2020: 25 mujeres por mes.
En 2021: 22 mujeres por mes.
Si contamos enero y febrero de 2022 las mujeres asesinadas mensualmente han sido 26.
256 niñas y niños han perdido a sus madres en el año 2020, 181 en 2021 y 43 en lo que va del corriente.
Dónde nos matan? Entre el 40 y el 60% de los femicidios ocurren en nuestros hogares.
Más del 60% de nuestros agresores fueron parejas y ex parejas.
El rango de edad: entre 20 y 40 años tanto víctimas como agresores.
Sé que son datos fríos, no los prefiero como herramienta discursiva para tratar cuestiones tan importantes y esenciales, pero creo que resumen un poco esto que voy a decir:
Estamos en condiciones como sociedad de profundizar en la construcción de masculinidades compatibles con el feminismo. Hemos realizado avances muy poderosos en las capas sociales y en nuestra cotidianeidad misma, increíbles momentos de conquista de derechos pero, atención! Las estadísticas no han fluctuado los últimos años. Y entonces? Ante esto: abrir caminos.
Hace tiempo vengo pensando en los hombres que se lanzan honestamente a acompañarnos en todo este proceso transformador. Nuestros afectos, amigos, compañeros de vida, que se analizan como sujetos masculinos con toda esa herencia que también les hizo y hace tanto daño; y se la juegan, repiensan el contenido de sus palabras antes de decirlas, piden disculpas, frenan ante un no, nos leen los rostros, buscan el dialogo, se exponen. Porque sé que existen y están creo que es hora de fortalecer esas masculinidades feministas, calar más, de a poco, desde la honestidad y el cariño. No es mi intención generar un tipo de debate desde la incomprensión y la rigidez como ya me ha pasado ante algunos dichos anteriores respecto a este mismo tema. Tengo presente siempre esta frase: no importa lo que se diga, sino lo que se diga en el momento en el que se está dispuesto a escuchar. Por eso lo vuelvo a tirar sobre la mesa y lo reafirmo.
Los necesitamos, y siempre será más que nunca. Porque no alcanza, porque la cosa no cambia. Porque nos violan en grupos, en la calle, a cualquier hora. Nos violan hombres, nos denigran hombres, nos golpean hombres, nos carcomen la mente hombres, nos asesinan hombres, nos entierran o nos cortan en pedacitos.. los hombres. Si fueran animales diríamos animales, pero no lo son. A los animales también los masacra el ser humano y no tienen nada que ver con nuestra oscuridad. Pero digo, si la cosa fuera distinta entonces yo no estaría escribiendo con este fin convocatorio. Nos matan, nos lastiman, nos reducen y nos afectan a niveles que no imaginan y son ustedes, esta es la realidad, hay que asumirla y tienen que comprometerse de verdad porque no va más la inmovilidad. No va más la complicidad. Recuerden siempre que militar nuestra vida es militar también su propia transformación.
No tengo dudas de que habrá una sociedad mejor si tomamos en serio al feminismo, asumido como la vanguardia de los avances sociales del siglo XXI y la solución directa para salirnos de esta decadencia en la que los seremos humanos estamos metidos.
Fuente: https://ahoraquesinosven.com.ar/reports?categoryExcluded=registro-femicidios
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